¿Cómo es?
Los erizos son inconfundibles, con los pelos de la espalda
convertidos en púas endurecidas. El erizo europeo o común es el insectívoro más
grande del país, ya que a menudo sobrepasa el kilo de peso. Unos músculos de la
piel le permiten enroscar su cuerpo escondiendo el vientre, las patas y la
cabeza, de manera que cuando se siente amenazado se puede convertir en una
auténtica bola de pinchos. Los erizos pueden pasar mucho rato en esta posición
hasta que están seguros de que ya no hay ningún peligro inmediato.
¿Cómo vive?
El erizo es un animal lento y tímido que se activa al
atardecer. Lo encontraremos a menudo en setos y cultivos cerca de zonas
habitadas. No es animal de grandes comilonas, sino todo lo contrario: es un
gran colaborador de los campesinos, ya que pasa la noche picando insectos,
caracoles y gusanos. A veces, roe la fruta caída de los árboles o se encarniza
en alguna carroña. Los erizos suelen criar una vez al año, en primavera, y
tienen tres o cuatro pequeños que nacen ciegos, desnudos y con las púas blandas
de color claro. Al cabo de dos semanas ya abren los ojos. Entonces, poco a
poco, se les empiezan a endurecer las púas, y a finales de verano ya son
independientes. En otoño buscan un escondite abrigado para pasar el invierno
bien aletargados. Si nadie les molesta, no saldrán de su madriguera hasta bien
entrada la primavera. Entonces se dan prisa en buscar comida para recuperar el
peso que han perdido durante la hibernación.
Especies semejantes
El erizo moruno es casi idéntico, pero más blanquecino, con
las orejas más grandes y el morro más cortó.